jueves, noviembre 12, 2009

Una noche en la ópera

El martes por la mañana viví uno de esos momentos de locura que le dan a todo el mundo: "Hoy no me levanto; estoy demasiado a gusto en la cama, calentita y cómoda; para lo que hay que hacer hoy... ¿a quién le apetecería ir a la universidad a una reunión con la directora del DEA para preparar la exposición del trabajo? Además, no tengo coche, tengo que coger el autobús. Decidido: me quedo a vivir para siempre en la cama".
Por suerte, me levanté. Pillé un autobús directo, nuevecito y muy cómodo, luego esperé a mi directora en el único banco libre al solecico y, en mitad de la reunión, me ofreció escribir un artículo juntas porque está tan impresionada con mi trabajo que me ha tenido que poner una Matrícula de Honor (¡!).
Cuando volvía a mi casa, me tiré del bus en la Gran Vía para hacer una visita a mi amiga Lydia y justo al pisar la calle, me llamaron al móvil para decirme que me habían tocado dos entradas para un concierto, en un sorteo al que me apunté el mes pasado en la biblioteca. Le escribí a Débora, vi a Lydia, dimos unos cuantos saltos en la calle, frente a su trabajo y blablabla. Volvamos al concierto.
Cuando me apunté no sabía ni de qué era; es más, cuando recogí las entradas no sabía ni de qué era. En Internet, descubrimos que era para la ópera Rigoletto. Y así, la segunda entrada, pasó automáticamente a mi padre, que le encantan todas esas cosas, y allá que nos fuimos anoche al Auditorio a ver una ópera por primera vez en nuestras vidas.
Tengo que admitir que Rigoletto nunca ha sido mi favorita, pero... es espectacular.
Cuando íbamos de camino, temía no entender nada y que fuera a durar horas y horas pero, gracias a los subtítulos (aunque a veces me olvidaba de leerlos), entendí casi todo y tampoco duró tanto.
Hay que decir que la historia tiene muchas lagunas y, como todos los personajes de obras tan dramáticas, son demasiado "arrebataos", que decimos por aquí, pero aun así estuvo muy bien. Muy recomendable.

6 comentarios:

xnem dijo...

Vaya se olvidó pasar por el BINGO, un día así no hay que dejarlo escapar.

Fui una vez a un estreno del Liceo, una ópera contemporánea, muy vistosa, no tiene uno tiempo de despistarse, hay tantas cosas, vamos solo le digo que luego terminamos en un bar del Raval con una de las cantantes.

María dijo...

BUf, el bingo, qué depresión! En los ciegos te puede tocar más. Aunque también es fecha ya de comprar la lotería de NAvidad...

amelche dijo...

Creo que Xnem tiene razón, tendrías que haber aprovechado ese día. Aunque ya lo aprovechaste bien.

Anónimo dijo...

viagra and alternatives viagra free sites computer find viagra free samples viagra free pills buy viagra in canada is viagra safe for women non prescription viagra pharmacy viagra how to buy viagra herbal viagra reviews viagra canada watermelon viagra buy cheap viagra online cost of viagra

xnem dijo...

esta anónimo parece mancha de aceite! y está por todas partes.

Cómo? aún no compró lotería? Y si toca allí?

María dijo...

Pues si toca aquí, me alegraré por mis vecinos.