Más bien sí que cupo, pero luego tuve problemas para volver a cerrarla tras pasar la primera noche en Dublín, rumbo a Cork.
Y los problemas fueron aumentando conforme iba comprando más y más cosas (tampoco eran tantas, la verdad, pero es que el espacio era escasísimo!), así que la solución fue comprar otra maleta y facturarla para la vuelta.
Dublín, Cork, Cobh, Limerik, los acantilados de Moher... un viaje chulo. Pero como suelo decir, esa es otra historia, y será contada en su momento (al menos no en la hora de la siesta).
5 comentarios:
...lo de Moher ha traido cola...la peña se ha vuelto loca, you know!!!
A mi no me llevais a sitios chulos de esos eh? vaya vaya XD
¡Sí que has visto cosas! Y no, ya está hecho a propósito en Ryanair para que la maleta no quepa en el cajoncito de marras y tengas que facturarla o pagar. Un cotilleo: De Alicante a Cork este verano miraban las maletas con lupa. Sin embargo, de Cork a Alicante valía todo, varios bolsos y maletas juntos como equipaje de mano, incluso maletas mucho más grandes de las medidas fijadas y todo el mundo haciendo la vista gorda. ¿Por qué? Porque así, a la vuelta a Cork, los turistas confiados iban a tener que pagar el doble porque en Alicante sí les mirarían con lupa la maleta. Creo que es un truco porque saben perfectamente que vienen aquí más irlandeses de vacaciones que españoles vamos allí (y eso que vamos bastantes, pero los irlandeses son siguen superando en número en los aviones, tanto a la ida como a la vuelta) y pegan la clavada al turista que vuelve de España cargado de souvenirs.
Me he equivocado, era "nos siguen superando", en vez de "son".
Amelche, me di cuenta de eso a mi vuelta. ¡¡Alguien traía un macuto gigantesco y nadie dijo nada!!
Bea, a la próxima te vienes, y ya está, no se hable más ;-)
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