Llevo unos días dándole vueltas a la cabeza, pensando en el futuro.
Desde siempre, cuando las cosas me iban mal, me imaginaba qué estaría haciendo el año siguiente; por muy mal que vayan las cosas, lo normal es que un año después todo eso se haya quedado muy lejos. Hasta ahora me ha funcionado. Sin ir más lejos, esta tarde, a eso de las 7 y media hará justo un año que el mundo se me vino abajo. Hará justo un año que deseé que fuera hoy. Hoy aquella tarde no parece más que un mal sueño.
Pero hace unos días, durante la comida, hablaba con unas amigas sobre lo que estaremos haciendo el año que viene. Las dos lo tenían más o menos decidido, aunque por supuesto, nada seguro, porque realmente nadie sabe lo que va a ocurrir. Mi amiga Raquel tenía súper claro lo que estaría haciendo yo, en qué lugar estaría comiendo, e incluso quienes estarían comiendo conmigo.
Pero yo no lo sé. Es una sensación muy extraña. Es como si la Nada de La Historia Interminable avanzara a toda velocidad hacia mí. Tengo que pensar rápido o me tragará.
Los últimos años he tenido claro cuál era la meta final, pero no el camino para conseguirlo. Ahora tengo que elegir el camino, pero tengo auténtico pavor de enfrentarme a él. ¿Por qué todo el mundo lo ve más claro que yo?
Desde siempre, cuando las cosas me iban mal, me imaginaba qué estaría haciendo el año siguiente; por muy mal que vayan las cosas, lo normal es que un año después todo eso se haya quedado muy lejos. Hasta ahora me ha funcionado. Sin ir más lejos, esta tarde, a eso de las 7 y media hará justo un año que el mundo se me vino abajo. Hará justo un año que deseé que fuera hoy. Hoy aquella tarde no parece más que un mal sueño.
Pero hace unos días, durante la comida, hablaba con unas amigas sobre lo que estaremos haciendo el año que viene. Las dos lo tenían más o menos decidido, aunque por supuesto, nada seguro, porque realmente nadie sabe lo que va a ocurrir. Mi amiga Raquel tenía súper claro lo que estaría haciendo yo, en qué lugar estaría comiendo, e incluso quienes estarían comiendo conmigo.
Pero yo no lo sé. Es una sensación muy extraña. Es como si la Nada de La Historia Interminable avanzara a toda velocidad hacia mí. Tengo que pensar rápido o me tragará.
Los últimos años he tenido claro cuál era la meta final, pero no el camino para conseguirlo. Ahora tengo que elegir el camino, pero tengo auténtico pavor de enfrentarme a él. ¿Por qué todo el mundo lo ve más claro que yo?
13 comentarios:
Es normal que cuando vayas a acabar un "ciclo vital" te plantees qué es lo que va a pasar contigo, cómo va a cambiar tu vida y también es normal que fantasees con tu futuro. Yo, por ritual, cuando una etapa finaliza me pregunto: ¿Dónde estaré dentro de 5 años? Siempre me imagino que es en algo maravilloso, puede que si o puede que no, pero es bueno plantearselo y ver pasados 5 años si la vida te ha jugado una mala pasada o se ha aliado contigo.
Hola María, yo creo que ese agobio al que tu te refieres lo sentimos todos o casi todos...o por lo menos yo. Es como si vieras un precipicio y algo que te gusta abajo, pero te da vértigo mirar y mucho más tirarte. Ten en cuenta que empezar una nueva etapa siempre es dificil, te esperan muchas cosas nuevas y buenas pero también dejas a trás momento inolvidables.
Ánimo y tirate sin miedo!!!
Besitos
Hola María:
Tenemos practicamente la misma edad por lo que se de qué hablas en primera persona, yo no creo que la obra de Michael Ende me persiga por medio de La Nada. Como suelo decir:
"El pasado y el futuro no existen, no puedes controlarlos. ¡Preocúpate del presente!"
Seguramente no te valga de nada, total no te conozco y tu vida es tuya pero para esos momentos en los que uno/a está de bajón piensa en los que te rodean y lo mucho que te quieren, con esa fuerza que en seguida notarás, verás como ves las cosas menos negras porque, al fin y al cabo, todo es gris.
En "Luna de Avellaneda", película impresionante de mi querida Argentina decían lo siguiente en tono cómico-realista:
"Existen días buenos y malos... por tanto hoy es un día promedio" ;)
Espero que te haya subido un poco la moral, si viviéramos en la misma ciudad nos tomábamos un café hablando del tema. Y recuerda, los problemas que nosotros tenemos no son dignos de preocuparnos, diría que hasta tenemos suerte de poder tenerlos... otros -por ejemplo- ni siquiera pueden pensar en ello nada más que en agarrar un fusil y matar o ser matado en un selva desconocida por la que nadie se interesa.
Perdón por el rollo jeje y ánimo!!
Besossssss,
Luis :)
Es típico de cuando acabas la carrera, a todos nos ha pasado. Ya irás encontrando el camino poco a poco.
Ludovica, pero qué camino vas a seguir para llegar a donde estés en esos 5 años?
Hola Bena!Supongo que al final me tiraré. Lo peor que puede pasar es que me estampe contra el fondo del barranco.
Luis, nada de rollo, pero me debes un café. Intento vivir al día, pero hay momentos en los que hay que elegir el camino de la izquierda o el de la derecha, o lo que es lo mismo: el que parece oscuro y pantanoso o el que tiene florecillas, mariposas y pajaritos.
Mi problema es que no veo ni pantanos ni mariposas, no veo nada y me tengo que tirar sin mirar.Sólo espero que los sueños puedan más que el miedo y elija el bueno.
Amelche, tienes un mapa?
pero porque pensar todo el rato en el futuro? acaso alguien sabe que haremos dentro de un año o cinco?
a veces es mejor vivir dia a dia y decidir que haras las siguientes 24 horas, no los siguientes años.
besos
El tema es sencillo, echa curriculums y ahí empieza el camino. Que no te gusta, pues cambias,no?Además María,vales mucho así que en cualquier sitio estarás bien. Y eso, que hay mucho mundo fuera del Murcia, ahorra mil euros y veter a Birminham un mes, eso sería una buena forma de empezar:) Y no te agobies manuela, just do it.jeje
"¿Cómo te ves dentro de 5 años?" es la típica pregunta de los procesos de selección. Al responderla, el candidato expone sus objetivos, sus metas, sus incentivos... que a veces nada tienen que ver con los de la empresa en cuestión, lo cual lleva a una situación realmente embarazosa.
No es una mala pregunta... lo que sí puede suceder es que se formule en condiciones inadecuadas. Cuando estás en una situación estresante, fantasear con el futuro puede ser bueno, pero también se corre el riesgo de no afrontar directamente el problema en cuestión y buscar su solución.
Pensar en el fututo es bueno en tanto que nos ayuda a clarificar nuestras metas. Pero eso no es suficiente. Lo siguiente es analizar nuestra situación actual y pensar qué es exactamente lo que nos separa de esa situación deseada. Identificar los problemas concretos (quizá descubramos que tenemos menos de los que pensábamos). Una vez identificados los problemas, podemos buscar las soluciones.
¿Qué es lo que tengo y qué es lo que desearía tener?
¿Qué es lo que tengo y qué es lo que no desearía perder?
No creo que sea la mejor solución, porque en la vida no hay solución únicas para todo, pero creo -por experiencia- que los cambios radicales y súbitos no suelen ser ventajosos, sino todo lo contrario, a menos que estén muy bien meditados. Pienso que lo más sabio es cambiar poco a poco, o mejor dicho, no dejar de cambiar en ningún momento. Como decían en el Gatopardo "hay que cambiar para que todo siga igual".
Un saludo
conmovedor tu pensamiento. No croe que los demás vean las cosa smás claras que tú como dices, sino que quizás los demás, no lo confiesan. Todos estoy convencida, hemso tenido crisis de no saber donde vamos como un barco a la deriba, viend oque el tiemp ose nos va de las manos y que hemso hecho y que no hemos hecho. a mi me pasa muchsiiisismo. Pero he aprendido a que sea lo que sea lo que pase por tu mente, NADA ha pasado, es deicr, nada ha perdido su ooprtunidad de que icurriese... yo con mis 34 años , estoy tyendo a la universidad ahroa, porque en su moemnto, pues no me dio esa luz, ya ves.. nunca es tarde. y el momento perfecto para las cosa,s puede ser también el que elijas... buena suerte... todo depente de como lo veas, o como lo aprendas a ver desde ahora...
Cuando acabé la Universidad la Nada me atacó y casi me vence. Ahí empezaron mis crisis, pero ahora sé que el día que sepa exáctamente como estaré al año que viene es que la vida será un muermo y que habré perdido el camino.
Me ha costado aprender a vivir con la incertidumbre pero hay que hacerlo peroque queramos o no siempre está ahí.
Da igual que te diga que eso que te pasa es normal, vas a sentirte igual, simplemente ve decidiendo las cosas tal y como lleguen, intenta no mirar demasiado lejos en el tiempo.
¿Has leído Momo, de Michael Ende? Hay un personaje, Bepo el barrendero, que es todo un filósofo. El resumen de su filosofía es pensar sólo en la próxima barrida, nunca en toda la calle que nos queda, porque si pensamos más allá nos vamos a agobiar y avanzamos mucho menos. Más información en el libro o en msn.
No sé, romperé un poco la tónica del foro. María te doy permiso para censurarme, jeje.
NO tuve crisis existencial y no entendía muy bien a la gente que las tenía. Por qué? Porque estuve haciendo cosas (prácticas, luego trabajando, luego investigando con becas...) y la vida, que es maravillosa, me ha llevado por donde ha querido (a veces tengo la sensación de que realmente yo no la he guiado). NO me imaginaba en cinco años, porque ni tan siquiera ahora lo hago. Simplemente voy día día, poco a poco, trabajando y sembrando. La vida te lo devolverá todo multiplicado por mil.
Poco a poco, sin estar parada nunca. Primero unas prácticas este verano... después solicitar becas... matricularte en cursos de posgrado... Supongo que teniendo todas las puertas abiertas hasta que una sea la que más te convence.
Ánimo! Nos tomamos un cafe´cuando quieras.
Besssss
"Luis, nada de rollo, pero me debes un café."
Tendrás todas las crisis que quieras pero las ideas claras también!! ;) Por supuesto, si me paso por allí te aviso y nos tomamos algo.
Muchos besos guapa y ánimo!
Luis :)
Gracias a todos. Voy a seguir exactamente como hasta ahora, es decir, preocupándome solamente por lo que va a pasar hoy. Así es precisamente como llegué hasta donde estoy ahora, con un "cambio en la dirección del viento" que me llevó hasta mi carrera. Al fin y al cabo, las cosas no me han ido tan mal...
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