Programa de las Fiestas de Primavera de 1919.
Antes de nada, dos cosas: la cara de la chica de la derecha era exactamente así en el original, no es que se me fuera la mano; y que la autora ha decidido dejar de hablar en tercera persona porque tal vez quedara bien en la primera entrega pero ya empieza a resultar cargante, además de algo raro.
Dicho esto, este cuadro lo pinté en la primavera de 2003. Es la portada del programa de fiestas de 1919, que tenía en un libro en mi casa. Como mi padre es tan amante de todas las cosas antiguas que tengan que ver con Murcia, no tardó ni dos segundos en decidir que este cuadro estaría en el pasillo de mi casa hasta el fin de los tiempos.
Hombre no es feo, pero tampoco es de los que más me gustan. Además eso, que la chica de la derecha tiene una cabeza un poco extraña. Pero bueno, lo pongo para hacer tiempo hasta que consiga la fotografía del último cuadro.
Sin nada más que contar por ahora, hasta luego.
Pdt.: Sólo faltan 10 días para mi cumpleaños.
6 comentarios:
Es lo bueno que tiene Murcia, siempres estais de fiestas.
Un caballito, una marinera, unos paparajotes, una empanada de Bonal...
Nunca estuve en las fiestas de Primavera de Murcia. Pero año tras año me prometo ir. Tengo familia allí, y las vacaciones de mi infancia eran murcianas. Me ha hecho ilusión ver el cartel. Besos.
Pues yo veo la cara de la chica de lo más normal. Quizá sea porque esta semana me he mirado demasiado en el espejo...
Enhorabuena, María, es alucinante cómo pintas. Yo nunca pinto nada en ninguna parte, me lo dice todo el mundo. Pero, en tu caso, es un don natural que deberías explotar más.
Un beso y hasta mañana.
A pesar del detalle de la cara (o tal vez por eso) a mí me sigue gustando cómo pintas. ¿Será porque yo nunca supe dibujar? Lo pasaba fatal en el colegio cuando me hacían dibujar cosas en la clase de plástica.
Xnem, te has olvidado de las gabardinas de Los Zagales!!
Vita, año tras año están peor, así que ven cuanto antes o te llevarás un chasco tremendo.
Nono, jajaja, eso de que no pinto ná también me lo dicen a menudo.
Amelche, el dibujo no es mi fuerte, de veras; lo bueno de la pintura es que lo puedes disimular perfectamente y lo único que tienes que hacer es decir: "es un toque artístico".
A mí de cría me encantaba dibujar, y no se me daba mal del todo, pero en cuanto pasaba del lápiz a los colores... el desastre.
La cabeza es extraña, pero no vamos a discriminar a la pobre chica por eso.
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