Capítulo 3: Vete y encuéntrate cualquier cosa a la vuelta.
Alguien me odia.
No sé, me parece muy fuerte tener enemigos tan cabreados con sólo 21 años. Cuando tenga 50, qué? Bueno, eso si llego, porque mis enemigos han empezado a atentar contra mi vida.
Que no, que no exagero, en serio. Esperaron sigilosos hasta que me marché del país, y entonces se fueron hasta mi pobre coche y clavaron una navaja tres veces en una de sus ruedas. Con lo que no contaban era con que mi padre lo iba a coger antes de que yo volviera para pasarle la revisión. El coche se iba, se iba, se iba... y la rueda explotó.
El caso es que a mi padre no le pasó nada porque todavía no había salido a la autovía y no iba muy deprisa. Además, conduce desde hace más de 25 años y sabe controlar el coche. Ahora bien, yo hace cuatro días que me he quitado la L, y reconozco que a veces hasta me cuesta trabajo aparcar, así que... podría haberme matado!! Y no sólo a mí, sino a toda la gente de alrededor!!
A qué clase de mente enferma se le ha podido ocurrir semejante cosa?? Pero además, por qué?
Vale que a veces sea difícil de tratar, y que la boca me pierde muchas veces, y que no soy lo que se dice una buenísima persona pero... de verdad que (creo) que no le he hecho nada a nadie para que quiera matarme!
Dice mi madre que lo habrán hecho por ella, algo que sería mucho más comprensible (se entiende que en su caso ella tampoco se habría matado, que sólo habría tenido que cambiar una rueda), pero yo meto y saco el coche todos los días del garaje (porque esa es otra: ha sido dentro del garaje!!), y todo el vecindario sabe que el coche lo llevo yo siempre, es más, lleva una supernena!!!! ¿Alguien se imagina a una señora de 43 años con una supernena,un Coco y un Epi en el coche???? Vamos, que se nota que el coche lo llevo yo casi todo el tiempo.
Cuando mi padre me llamó a Roma y me lo contó todavía no sabían si se había pinchado o qué, pero el mecánico confirmó lo de las tres rajadas. Dicen que no le dé importancia, pero la verdad es que me trastoca un poco pensar que hay alguien por ahí que simplemente va a hacer daño, sin importarle las consecuencias que puedan tener sus gamberradas. Es alguien que ha salido de su casa con algo que pincha, que ha esperado a poder colarse en el garaje (me cuesta pensar que haya sido alguien de dentro), que se ha liado a tajadas con una rueda bastante gorda y luego ha salido como si nada, tan tranquilo.
¿Qué habré hecho ahora?
6 comentarios:
¡Qué gente más bestia hay por el mundo! Tendrás que mirar bien las ruedas antes de salir de casa a partir de ahora. Y, si no hay mucha luz en el garaje, cuando salgas fuera, paras un momento y lo miras.
Madre mia maria, que te corten el mal de ojo pk vaya tela...
María tu no te preocupes por eso, si es que hay tanta gente mala en este mundo que seguro que ni sabian de quien era el coche, simplemente se levantaron con ganas de pinchar ruedas y ale, a pinchar se ha dicho.Yo lo flipo cada día más!
Tranquila, es sólo un poco de cobardía... o bastante, diría yo. No creo que, sea quien sea, lo vuelva a repetir, porque ya se habrá quedado a gusto.
Y estoy seguro de que no te hará daño, porque no tiene lo que hay que tener para encararse contigo. Aunque tú, seguramente, no eras el blanco de su cobarde ira.
Gracias gracias!!
Ludovica, ya sabes que no creo en el mal de ojo. Menos mal que no me lo creo! si no, viviría totalmente atormentada por el hecho de que alguien hubiera querido echármelo!
Yo tampoco creo que fuera el objetivo, mis enemigos no son tan enemigos de momento... pero hay que ser muy memo para no darse cuenta de que el coche es mío!!
Yo hace mucho que llevo coche y a veces también me cuesta aparcar, sobre todo cuando hay mucho sitio disponible.
Misterioso, ¿algún “atontao”?, ¿alguien despechado? ¿Cabreado por algo? A ver si va a ser un ex?, si yo te contara.
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