domingo, noviembre 11, 2007

El poder de una canción

Hay canciones que te acompañan en los momentos decisivos de tu vida. Hay canciones que te hacen sentir bien, que te animan, que te sirven de refugio, que te arropan y te alejan de todo lo demás.
Siempre he tenido determinadas canciones que me hacían sentir así, pero fue el viernes cuando realmente comprendí el enorme poder que puede tener una canción.
Esta semana ha sido una de las peores de mi vida, de verdad. Como ya venía mal del finde, el lunes hice lo que hago siempre que necesito un cambio urgente: cortarme el pelo. El martes no fue mal día, pero el miércoles empezaron a torcerse las cosas a lo bestia.
Para el que no lo sepa, la semana anterior habían sentenciado de muerte a mi programa, y nos habían puesto a preparar un programa del corazón. No me hacía mucha gracia, por no decir ninguna, pero siempre sería mejor que lo mío. En cualquier caso, representaba una oportunidad de cambio que necesitaba con urgencia, así que empezamos a ponerle mucha ilusión y empeño para aprender a montar vídeos y todo eso. Vamos, lo que viene a ser prepararse para un nuevo proyecto.
El jueves, de pronto, cuando ya creía el otro programa borrado para siempre de mi vida, van y nos dicen que tendríamos que preparar cinco refritos más (como los que habíamos hecho la semana anterior). Al rato nos vuelven a llamar a otra reunión y nos dicen que hay que hacerlos entre lunes y martes, no jueves y viernes, como pensábamos.
Empecé a sentirme realmente mal. No me apetecía hablar, ni moverme, ni nada de nada. Pero es que van y nos llaman otra vez, ahora para decirnos que el programa sigue hasta diciembre.
Pasé todo el día yendo cada dos por tres al único sitio donde podía estar sola, un aseo del piso de abajo, donde pasaba varios minutos llorando. Mis amigos estaban todo el tiempo intentando animarme, pero eso sólo hacía que me agobiara más. Incluso llegué a ir dos veces a RR.HH. para informarme de lo que tenía que hacer para dejar el trabajo cuanto antes, pero las dos veces el chico estaba ocupado. No sé qué hubiera pasado si llego a ir una tercera.
El viernes, me levanté tres horas antes para intentar ir de buen humor, porque me pongo bastante estúpida, y al final lo acabo pagando con la pobre Inma (pero es que se lo merece!!). Otra reunión. Esta vez nos dijeron que, además de los cinco refritos que había que preparar para grabar lunes y martes, había que grabar otros cuatro programas normales para jueves y viernes. Aquí es donde entra Downtown, de Petula Clark.
Esta canción la había escuchado antes, pero se me quedó en la cabeza a raíz de un par de episodios de Perdidos, donde la escucha un personaje llamado Juliet, que es mi favorito. El caso es que esa misma mañana me la había metido en el mp4, así que nada más salir de esa horrible reunión y de jurar y perjurar que no iba a entrar más veces en ese despacho fatídico tuve un ataque de risa histérica, y luego me puse a oír una y otra vez esta canción. Gloria hizo lo mismo, y así estuvimos las dos toooodo el día, escuchándola una y otra vez. Y otra y otra y otra... Y el caso es que después de escuchar una canción como 40 veces se le podría coger algo de manía, pero no. Esta canción era lo único que hacía que no nos fuéramos de allí corriendo hasta desaparecer de la vista de esa horrible gente. Escuchadla si podéis.

11 comentarios:

MeTis dijo...

no te lo vas a creer maria, pero acabo ahora hace 5 minutos de ver el episodio de "perdidos" justo en el que ella se mira al espejo... seran las coincidencias del señorito?
yo me hubiera puesto a la gloria "i will survive" y la hubiese gritado, si señora.

espero que la semana que viene sea mas relajadita, pensare en ti cuando este paseando por la rambla y tomandome el cafe sola, porque vamos como sois para quedar¡¡¡

besoss

Ludovica dijo...

Cuando me da "el chungo" me pongo la que canta La Cabra Mecánica y María Jiménez, la de Tú que eres tan guapa"...me da por acordarme de una noche en el q3 muy surrealista y me rio hasta que no puedo más. Hay canciones mágicas, acabo de oir la tuya. Besos darling

amelche dijo...

Dios mío, si es la canción que dice mi padre que escuchaba en el año 64 cuando tenía 18 años y fue camarero en la Costa Brava... No es que me parezca mal pero, ¿no te gustan canciones más modernas? Y verás cuando venga Xnem contándote con su sabiduría musical todas las versiones que ha habido desde entonces y quiénes las cantaron...
Esto te va a gustar. :-)

Metis: La de "I will survive" me recuerda a un libro de inglés que tenía en una academia, donde salía esa canción. Y, para que no te quejes de que eres menos que María,
esto para ti, Metis.

doble visión dijo...

No podes imaginarte cómo te entiendo....para mi la musica es el único salvavidas efectivo.

Si habré evitado naufragios oyendo hasta el hartazgo determinadas canciones!!!

me encantó conocer tu espacio (vengo del de Amelche) y saber que te conmueves con una canción como Downtown.

saludos
marcelo

Nono dijo...

María, te envío un cariñoso abrazo desde mi mundo. ¡Qué largos se me han hecho estos cuatro meses alejado del blog! Pero la tierra es redonda, y la vida también. Por eso vuelvo y te doy la razón en lo del poder de las canciones, porque siento que a veces yo también necesitaría alguna. Mucha suerte con los programas y hasta pronto.

P.D.: Saludos a Bea Gracia, Rebeca Uris, Paco Campos, Nieves Barnuevo, Alfredo Benito y los otros doscientos conocidos... Algún día me tienes que enseñar las instalaciones, no lo olvides.

María dijo...

Metis, es que quedar en Barcelona... me pilla un pelín lejos. Pero ahora que estás de vacaciones, es el momento de bajar a estos lugares.

Ludovica, hay canciones para cada momento. Ésta era la que nos hacía falta.

Amelche, me gustan las buenas canciones, sean de cuando sean. Precisamente, la mayoría de mis favoritas son bastante antiguas. Pero eso me gusta, no te creas; así son un poco "más mías".

Marcelo, bienvenido y gracias.

Nono!! Dichosos los ojos que te leen! Ya pensaba que habías abandonado la blogosfera. Espero que todos estos meses te hayas empapado de historias para contar... Pásate por la tele cuando quieras, que estamos ansiosos de ver gente del exterior.

Anónimo dijo...

Cuando tengas un mal día sólo piensa en lo poco que queda para irnos a Madrid a ver a las Spice!!! y que va a ser un pedazo de concierto!

fluyendo dijo...

hoy descubro tu blog...qué mundo complicado el que habitas maría!
la música suele transportarme...aveces puedo sentir olores y revivir momentos atraves de la letra de una canción...así q comparto tu opinión sobre "el poder de una canción"

Ludovica dijo...

¿Qué canción tienes para mi en este momento??

María dijo...

María, eso eso, a las Spice. El sábado me voy al Fnac a comprarme el disco.

Fluyendo, bienvenida. Voy volando a tu blog, a ver cómo es tu mundo.

Ludovica, ya tienes la canción en tu mail. Happy Birthday de Stevie Wonder.

Lydia dijo...

Lo había leído antes. He vuelto a releerte.
Juliet también es mi personaje favorito, junto a Desmond, siempre he pensado escribir algo sobre la serie, quizá sea el momento, después de esta dulce coincidencia.

:) Besos guapa. Preciosa la canción, mágica, sí.